Hace muchísimos años me regalaron este joyero, es de una tienda que hay en Valencia que se llama Momparler, es una tienda de detalles y regalos de las de toda la vida, desde 1870 ahí es nada...
Me encantaba, pero ya estaba un poco viejo y triste, así que me puse manos a la obra...
Manita de pintura blanca, manita de pintura amarilla, un poquito de lija suave en las zonas en las que quería que se viera el blanco. Un poco de decoración la técnica del decoupage (ya sé que os dije que la siguiente entrada era explicando esta técnica, pero he estado terminando cosas que tenía empezadas desde hace 1.000 años y no he podido pulir bien el texto, prometo que pronto, muy pronto lo publico, palabrita de Mari...)
También lo volví a tapizar por dentro y creo que quedó de lo más coqueto...
Y hoy os dejo con este tema que, aunque antiguo, se ciñe mucho a los tiempos que nos han tocado vivir...
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